Elah – Programa de desintoxicación para mujeres jóvenes y niñas

Retorno ahora cuenta con dos programas de desintoxicación

Elah – desintoxicación para mujeres.
Alon – desintoxicación para hombres.

Elah ofrece una solución inmediata a mujeres jóvenes en situaciones peligrosas que consumen drogas, alcohol y tienen conductas peligrosas. Elah es el primer paso en el proceso de recuperación, liberando a la joven de su entorno y de los peligros que la rodean.

Completar el programa de desintoxicación para mujeres jóvenes es el primer paso hacia la recuperación y la rehabilitación.

Los ex alumnos de Elah incluyen mujeres de Estados Unidos, Canadá, Australia, el Reino Unido y otros países.

Elah brinda atención física y emocional, basada en una dinámica grupal, donde el grupo se convierte en la base de una vida saludable. Las chicas se apoyan mutuamente, convirtiéndose en pilares de apoyo mutuo, enfatizando la relación recíproca, ayudándose mutuamente y responsabilizándose por su bienestar. Esta dinámica es esencial para evitar que las integrantes del grupo recaigan en el consumo de alcohol, drogas y conductas peligrosas del pasado.

El entorno terapéutico proporciona un lugar seguro para aprender, a través de ensayo y error y experiencias reparadoras, cómo enfrentar los desafíos cotidianos sin recurrir a sustancias químicas que alteran la mente.

El programa de Elah aumenta la autoconciencia y la conciencia social, y mejora las cualidades y atributos positivos que permiten a las jóvenes afrontar sus desafíos de una manera totalmente nueva.

Las chicas viven en una residencia universitaria, con un horario estructurado que incluye diversas actividades que favorecen una vida saludable. El enfoque del tratamiento es físico, clínico, conductual y social.

El objetivo del tratamiento es desintoxicarse de sustancias adictivas. Crecen, se recuperan, aprenden a controlarse a sí mismos y a los demás, y aprenden a hacer cambios positivos para crear una nueva realidad.

Objetivos

Abstinencia física de sustancias psicoactivas y/o alcohol
El inicio de un proceso de recuperación en un entorno protegido
Concientizar sobre los problemas que llevaron a la situación actual
Reconocer patrones de comportamiento que causaron desregulación emocional y la necesidad de “utilizar”
Desarrollar la motivación para el cambio en un ambiente de crecimiento y recuperación
Adquisición de herramientas básicas para una vida sana y limpia
Aprender a confiar, sentirse seguro en los círculos sociales.
Integrar experiencias valiosas en diferentes áreas de crecimiento personal como la música, las manualidades, el movimiento, la terapia a caballo, la terapia asistida con animales, etc.
Conectarse con uno mismo y el entorno desde un lugar saludable y “limpio”, sin sustancias que alteren el estado de ánimo ni la mente.
Llevar al cliente, lo más rápidamente posible, a la atención continua.

Cada cliente será dirigido al programa más adecuado para él: la comunidad de pacientes adultos hospitalizados, la comunidad de pacientes jóvenes hospitalizados u otra instalación.

Tres etapas del tratamiento

Etapa uno

Abstinencia física de sustancias (si es necesario). La abstinencia se realiza mediante intervención médica, incluyendo terapia de reemplazo de drogas, bajo la supervisión de un narcólogo y una enfermera disponible las 24 horas. La terapia de reemplazo de drogas se utiliza solo durante la primera etapa del tratamiento.
Horarios regulares de vigilia y sueño, comidas nutritivas, higiene personal y aclimatación al entorno aislado.
Integración en círculos sociales

Etapa dos

Familiarizarse con un marco terapéutico: terapias grupales e individuales
Identificar las necesidades de cada individuo, en función de su historia personal, traumas pasados, estados emocionales y nivel y tipo de consumo de drogas.
Conciencia de patrones de conducta dominantes que llevaron a la joven a una situación en la que perdió el control de su vida y falta de funcionamiento regular.
Trabajar en las relaciones interpersonales dentro del grupo y con el personal, utilizando los sucesos cotidianos como medio para mejorar.
Reconocer los desafíos del mundo de las emociones, comprender la autoimagen y los inicios de la autoaceptación.

Al finalizar la Etapa 2, dos meses después del inicio del tratamiento, se reunirá un comité de evaluación, integrado por la propia paciente, su familia, el personal terapéutico y la persona que la inició en el tratamiento. El objetivo de este comité es elaborar un resumen provisional con sugerencias sobre la continuación del tratamiento.

Etapa tres

Esta etapa es una continuación de la segunda. Tras la evaluación, se inicia el proceso de internalización y preparación para la atención continua después de Elah.

Personal

El personal de Elah está formado por un equipo multidisciplinario que incluye médicos, enfermeras, trabajadores sociales y consejeros profesionales.
Elah está bajo la dirección de la Dra. Katya Levine y la supervisión del Ministerio de Salud.

Admisiones

Para las mujeres jóvenes que vienen del extranjero, la derivación suele ser realizada por la familia o un profesional. Las graduadas del programa de desintoxicación Elah pueden acceder al programa de rehabilitación residencial para adultos en Retorno. Para las mujeres que deciden quedarse en Israel, el programa Mifgashim de Retorno ofrece apoyo continuo para una vida comunitaria exitosa . Para las mujeres que regresan a sus hogares en el extranjero, el personal de Retorno trabajará para facilitar su incorporación y brindar apoyo comunitario continuo.

Las mujeres israelíes pueden ser derivadas a Elah por centros médicos y de salud, servicios sociales, el Servicio Penitenciario de Israel, médicos convencionales y alternativos, escuelas, familiares, miembros de la comunidad o la propia joven.

Para garantizar la salud y seguridad de los clientes, se deben realizar diversas pruebas de laboratorio.

Garantizamos que todas las chicas que cumplan con los criterios de Elah serán aceptadas lo antes posible. Les ofrecemos a cada una de ustedes todo nuestro profesionalismo, atención y cariño.